Los productos y servicios que las empresas ofrecen pueden pasar por diferentes rutas desde que se fabrican hasta que llegan al cliente final. Las rutas de los fabricantes, las de los proveedores… y todo ello según las necesidades o plan estratégico que cada compañía tenga diseñado. Pero existe una alternativa para minimizarlas: el canal directo de distribución.
Existen dos tipos diferentes de canales de distribución, el directo y el indirecto. Y cada uno de ellos tiene sus propias ventajas, desventajas y características particulares.
En esta ocasión, desde Ekon, vamos a profundizar más en el primero, del que te contaremos los beneficios, los inconvenientes y las principales formas en las que puedes ponerlo en marcha.
¿Qué es un canal directo de distribución?
El canal directo de distribución es aquel que las empresas utilizan para comercializar sus productos y distribuirlos directamente a sus clientes. Es decir, sin intermediarios. Del fabricante al consumidor final.
Por lo tanto, con él se desarrollan todas las tareas desde la misma compañía; desde la fabricación hasta el almacenaje, el transporte y la comercialización.
¿Cuáles son las ventajas del canal directo de distribución?
Este tipo de canal de distribución es el más utilizado, principalmente por las pequeñas empresas o aquellas que están dando sus primeros pasos. Y es que proporciona grandes ventajas a tener en cuenta:
- Con él se reducen y limitan los costes globales.
- Permite que aumenten los beneficios económicos, puesto que no hay que contar con presupuestos ni partidas para los intermediarios.
- Proporciona información de primera mano sobre todos los procesos, por lo que resulta mucho más sencillo detectar incidencias y corregirlas.
- Gracias al canal directo de distribución se obtienen impresiones veraces y fiables por parte del consumidor.
- Fomenta una relación de confianza con el cliente.
- En caso de que las ventas se lleven a cabo vía internet, permite ofrecer una disponibilidad de 24 horas al día, los 7 días de la semana.
¿Y sus desventajas?
Al igual que el indirecto, el canal directo de distribución también cuenta con una serie de desventajas. Es imprescindible que las conozcas para que sus efectos afecten lo menos posible a tu empresa, y son las siguientes:
- Limita la zona geográfica en la que se pueden comercializar los productos, puesto que es mucho más difícil que la flota de la compañía pueda desplazarse muy lejos.
- El número de ventas, a consecuencia de lo que acabamos de comentar, es inferior. A menor radio de acción, menor volumen de ventas.
- Con él se precisa de más personal, y por tanto se generan más costes, para poder desempeñar todas las tareas de la distribución y la administración.
Las diferentes formas de implementar un canal directo de distribución
Para poner en marcha un canal directo de distribución en tu empresa puedes seguir varios caminos. Pero aunque existen diferentes formas de hacerlo, básicamente, se podrían agrupar en dos grandes bloques:
En primer lugar, la forma física
Este tipo de implementación del canal directo de distribución hace referencia a cuando son los propios comerciales de la empresa quienes llevan los productos directamente a los clientes.
Es decir, acuden a ‘casa’ de los consumidores para ofrecerles y entregarles los productos.
La forma digital o no física
Se trata de la modalidad en la que la compañía pone al servicio de sus clientes diversos canales para que sean ellos quienes puedan solicitar los productos que desean y contactar con la compañía para hacer los pedidos.
Estos canales pueden ser medios digitales, como una web, por ejemplo, catálogos o anuncios publicitarios. Aunque también se pueden llevar a cabo a través de reuniones en el propio domicilio del cliente o por correo, ya sea enviando la información de los productos por correo ordinario o electrónico.
Independientemente del canal de distribución con el que cada empresa quiera contar según las estrategias que tenga marcadas, todas las compañías necesitan contar con un software ERP de gestión de empresas, como el de Ekon.
Este tiene que ser fácil de usar, intuitivo y eficaz. Además de ayudar a controlar todos los aspectos necesarios para que los beneficios sigan aumentando y se pueda mantener un control global de todos los aspectos importantes para el buen funcionamiento del negocio. ¿Tu empresa tiene ya el suyo?
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22 de noviembre de 2022
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