certificaciones de obra
9 Ago. 2021

Cómo elaborar certificaciones de obra

 

Toda empresa constructora o de reformas necesita controlar a la perfección las certificaciones de obra. Estos documentos recogen información relevante, ya que reflejan la suma de los distintos trabajos ya finalizados en una obra, segmentados por las partidas que se han creado previamente en el presupuesto cerrado. 

En estos papeles, por tanto, están indicados los gastos de personal, de materiales, de desplazamientos, etcétera. Así, las certificaciones de obra se encargan de certificar (de ahí su nombre) que lo pactado con el cliente se corresponde con los trabajos que se han realizado

En las siguientes líneas te explicamos por qué estos documentos son tan importantes, qué elementos deben incluir y cómo elaborarlos correctamente. 

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¿Por qué son importantes las certificaciones de obra?

Básicamente, las certificaciones de obra garantizan que el trabajo completado es fiel a lo que se recogió en el presupuesto en su momento y, por tanto, a lo que aceptó el cliente. Sirven para tener esa garantía y también para poder facturar tras la ejecución de las obras. Además, estas certificaciones son importantes para que las compañías constructoras puedan cobrar con antelación una parte del presupuesto final pactado. 

Gracias a ellas, estas empresas se aseguran de contar con esa cantidad de dinero que les paga el cliente antes de terminar el trabajo. Algo que puede ser necesario, sobre todo si se trata de una construcción a largo plazo y la compañía no puede asumir tal inversión por mucho tiempo. 

Por otro lado, las certificaciones de obra que se emiten se corresponden con los distintos pagos con los que se va a saldar la totalidad del proyecto

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Qué elementos debe incluir una certificación de obra

Toda certificación de obra debe indicar el porcentaje de la obra que ya se ha realizado, para que el cliente se pueda hacer una idea de cómo avanza la construcción. 

Los números han de estar claros y deben ser fáciles de entender. El documento tiene que desglosar bien los costes de cada partida, con su porcentaje correspondiente de base imponible e IVA. Además, han de constar las desviaciones (positivas o negativas) que hayan aparecido y sus correspondientes costes. 

Tampoco puede faltar la información relativa al proyecto, el número de certificación de la obra, la clase o tipo a la que esta pertenezca y los plazos de ejecución de los trabajos ya completados. Del mismo modo, debe reflejar los datos del cliente y de la empresa constructora, y las firmas de ambas partes. 

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Cómo se elaboran las certificaciones de obra 

Un modelo básico y común de las certificaciones de obra es el que describimos a continuación. Lo primero que debes saber es que la elaboración de estos documentos corre a cargo de la dirección facultativa de la obra. Es decir, de un ingeniero o un arquitecto que debe indicar su número de colegiado y el colegio en el que esté inscrito o el cargo al que esté adscrito. 

Título completo del proyecto

Inmediatamente después de esto, debe aparecer otra información importante: el título completo del proyecto, junto a la ubicación de la infraestructura (término municipal y provincia). Además, debe especificarse el nombre del cliente para el que se realiza el trabajo. 

Información detallada del proyecto

En el siguiente apartado, ya se incluyen todos los detalles de los trabajos que certifica la empresa como tal y como contratista, indicando su fecha de inicio y de finalización. Debe aparecer su coste en euros, sin impuestos y con ellos, junto a los detalles de las actuaciones realizadas. En otras palabras, hay que indicar en qué han consistido las obras y sus características principales, siempre dentro del subgrupo que corresponda. 

Así, se debe incluir su naturaleza, sus dimensiones, su capacidad, el número de unidades de tal producto empleado, el tipo de acero, el tipo de hormigón, las luces entre apoyos, las herramientas, la maquinaria empleada, los gastos de suministros eléctrico y de agua… Y, por supuesto, en su subgrupo adecuado, también hay que hacer constar los costes de la mano de obra (albañil, peón, etc.). 

Si tienes que elaborar certificaciones de obra, te recomendamos utilizar un programa ERP. Te ayudará a gestionarlas si estás trabajando en varios proyectos al mismo tiempo. Así tendrás un registro inequívoco de cada una de ellas e incluso podrás introducir modificaciones, si se presentan nuevos gastos imprevistos y posibles desviaciones negativas o positivas. 

Gracias a esta herramienta, consigues hacer un seguimiento sencillo y cómodo de las certificaciones de obra, sin dificultades durante las gestiones. Una solución ideal es Ekon Construcción, un software que te permite automatizar y digitalizar todos tus procesos en un único espacio seguro y fiable. Puedes incluir, además, todos estos certificados.

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