trazabilidad alimentaria
8 Jun. 2021

La trazabilidad alimentaria, un procedimiento indispensable para el sector

 

El 28 de enero del año 2002 se estableció la obligatoriedad de llevar a cabo una correcta trazabilidad alimentaria en todas las empresas del sector de la alimentación de la Unión Europea. Y es que, tras detectarse varios errores a nivel europeo que desencadenaron un sentimiento de inseguridad y cierto malestar entre la población general, se determinó que llevar un control exhaustivo de todo lo relacionado con los productos de alimentación era primordial.

Por ello, a día de hoy es imprescindible contar con un buen software que permita controlar todos los procesos por los que pasan los distintos alimentos y así cumplir con todas las normativas europeas reforzadas por la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición. 

¿Quieres saber más sobre la trazabilidad alimentaria? A continuación te explicamos sus puntos clave.

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¿En qué consiste la trazabilidad alimentaria de un producto?

Según el Reglamento CE 178/2002 del Parlamento y del Consejo Europeos, la trazabilidad alimentaria queda definida como la posibilidad de seguir el rastro de un alimento, pienso o ingrediente en concreto, para poder encontrarlo y tenerlo bajo control en cualquiera de sus diferentes etapas. Ya sea en la producción, en la transformación o en la distribución.

De este modo se garantiza la protección de los consumidores y se puede llevar a cabo la retirada de cualquier alimento en el que se haya detectado algún problema o error. A la vez, claro está, la trazabilidad alimentaria permite facilitar al consumidor mucha más información, específica y exacta, sobre este tipo de productos.

En la actualidad, los centros logísticos también se encargan de llevar a cabo tareas relacionadas con productos del sector alimentario, como la gestión de ubicaciones, la preparación de pedidos, la expedición o la personalización y, por ello, también están obligados a desarrollar un correcto plan de trazabilidad alimentaria que garantice la protección del cliente final.

Las diferentes visiones de la trazabilidad alimentaria

En lo que a trazabilidad alimentaria se refiere, existen tres visiones diferentes desde las que se puede rastrear un producto. Veamos, a continuación, cuáles son:

Visión pre llegada

La visión pre llegada consiste en que la empresa debe conocer toda la información de cada producto antes de que llegue a sus manos y a su gestión. Esto incluye, entre otras cosas, dónde ha sido fabricado, cómo, por quién, cuándo y cómo ha sido transportado hasta llegar a su almacén o punto de distribución.

Visión interna

Dentro de la trazabilidad alimentaria, esta visión se ocupa de todo el recorrido que ha seguido un producto desde su llegada a la empresa hasta su salida de la misma. Esto es, desde la recepción, al almacenaje, la posible interacción provocada, o no, con otros productos, si se ha llevado a cabo algún tratamiento sobre él, si se le ha aplicado algún proceso, etc.

Es decir, la visión interna recoge todo, absolutamente todo, lo que haya pasado con ese producto una vez haya cruzado las puertas de la compañía.

Visión hacia adelante

En este caso, se toman datos de todo aquello que suceda una vez el producto haya dejado de estar bajo la gestión de la compañía. Es decir, cómo se hace el transporte, dónde, a quién, cuándo, en qué cantidad y cualquier otro detalle al respecto. Así, la visión hacia delante implica llevar a cabo un seguimiento postventa de los productos.

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¿Cómo realizar un plan de trazabilidad alimentaria?

La Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición (AECOSAN) ha creado una completa guía en cuanto a las prácticas de la trazabilidad alimentaria. En ella se establece que un plan de trazabilidad debe tener en cuenta los siguientes puntos para que sea correcto, fiable y eficaz:

El producto

Identificación de los productos y definición de los criterios de agrupación de los mismos.

El sistema de registro y la documentación

Debe definirse con claridad y exactitud un único método de registro en el sistema, con el que se deje constancia de todos los datos que tengan relación con el producto o la agrupación de productos.

Además, se ha de permitir el acceso a la información completa por parte de todos los involucrados, principalmente todos aquellos que formen parte de la cadena de suministro, sin que esto ocasione ningún tipo de alteración.

En este sentido, es muy recomendable, sino necesario, utilizar programas automatizados y software diseñados para la correcta gestión de todo el proceso, como el que te ofrecemos en Ekon. Con un software de este tipo es mucho más sencillo utilizar herramientas para un registro correcto, elementos tecnológicos, identificación instantánea etc., lo cual facilita la entrada en el registro de materias primas, materiales u otros productos de la empresa, así como los registros de todos los procesos de elaboración, procesamiento o transformación, o los de productos envasados y de todas las comprobaciones que se hayan llevado a cabo.

La identificación

Por último, un buen plan de trazabilidad debe contar con un impecable sistema de identificación desde el cual se pueda hacer un seguimiento exhaustivo de las tres visiones que forman parte de la trazabilidad alimentaria y que hemos comentado en el apartado anterior. 

Cumplir con las leyes es necesario para cualquier empresa, y esto incluye las referentes a la trazabilidad alimentaria. Si tu compañía trata con productos del sector de la alimentación, contar con un software especializado no solo te facilitará enormemente la tarea y te evitará problemas, sino que es prácticamente indispensable.  

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