En la cadena de producción se utilizan muchas máquinas que, inevitablemente, sufren averías. El uso continuado de las mismas hace que los daños puedan ser frecuentes y que, por tanto, sea imprescindible contar con un buen plan de mantenimiento preventivo que ayude a disminuirlos.
Desde Ekon, a continuación, te explicamos qué es un plan de mantenimiento preventivo, cómo llevarlo a cabo y cuáles son sus ventajas.
¿Qué es un plan de mantenimiento preventivo?
El plan de mantenimiento preventivo hace referencia a todas aquellas acciones que llevan a cabo los equipos de mantenimiento en todas las instalaciones o máquinas de la empresa. Estas acciones están basadas en protocolos ideados por la compañía para aumentar la productividad y la optimización de recursos y, al mismo tiempo, la vida útil de cada una de las partes.
Con el plan de mantenimiento preventivo se consiguen reducir las paradas técnicas y los costes de las reparaciones o de la adquisición de nuevas máquinas. Además, se alarga la vida útil de aquello que la empresa ya tiene en stock y se evitan las posibles sanciones por incumplimiento de las normativas legales.
Pasos para crear un plan de mantenimiento preventivo
Para crear un buen plan de mantenimiento preventivo es necesario seguir los siguientes pasos:
Crear objetivos
En primer lugar, es imprescindible definir claramente cuáles son los objetivos que se quieren alcanzar con la puesta en marcha del plan de mantenimiento preventivo.
Estos pueden variar en función de la empresa y de sus necesidades, pero comúnmente suelen ser los siguientes:
- Reducir al mínimo los riesgos de accidentes laborales causados por el mal funcionamiento de la maquinaria.
- Evitar la pérdida de materias primas como consecuencia de un mal uso en la cadena de fabricación.
- Aumentar la productividad y la vida útil de toda la maquinaria.
- Disminuir costes.
Marcar un presupuesto
El presupuesto es esencial para cualquier acción que la empresa lleve a cabo en cualquiera de sus departamentos y, como no puede ser de otro modo, en el mantenimiento preventivo también.
Por ello, es fundamental establecer cuál es el presupuesto económico que se quiere dedicar a esta tarea.
Revisar los mantenimientos existentes
Para poder optimizar todos los recursos que se van a destinar al mantenimiento preventivo, es esencial revisar y evaluar cuál es el estado actual de toda la maquinaria. Y valorar, por otro lado, si es preferible adquirir nuevas máquinas antes de empezar con el plan.
Escoger el tipo de mantenimiento a realizar
El plan que se establezca tiene que poner el foco, también, en cómo debe ser el mantenimiento preventivo. Lo hay de dos tipos diferentes. Por un lado, está el mantenimiento en función del tiempo y, por otro, aquel en función del uso.
Según el tipo de mantenimiento que se quiera hacer, se idearán acciones concretas para poder realizarlo.
Estructurar un plan y revisarlo
Una vez se hayan definido los objetivos, el presupuesto y el tipo de mantenimiento preventivo más adecuado, se deberá revisar íntegramente el plan para garantizar que las acciones previstas son correctas y, si es necesario, modificarlas, eliminarlas o incluir nuevas.
Es muy importante que el plan de mantenimiento preventivo esté bien estructurado y delimitado para que todas las personas que intervengan en él sepan qué hacer en cada momento y cómo hacerlo.
El mantenimiento correctivo
Cuando hablamos de mantenimiento correctivo nos referimos a una serie de acciones destinadas a corregir los errores en las máquinas que necesitan repararse o reemplazarse para poder seguir desarrollando su función.
El mantenimiento correctivo no forma parte del plan de mantenimiento preventivo, pero va muy ligado a él. Y es que con una buena prevención es mucho menos probable que se tenga que llevar a cabo el mantenimiento de corrección.
El coste de un mantenimiento correctivo puede ser importante si las empresas no lo tienen en cuenta con anterioridad o no llevan a cabo un buen mantenimiento preventivo.
Conclusión
Idear y aplicar un buen plan de mantenimiento preventivo produce grandes beneficios para la empresa que lo desarrolla. Entre ellos, el ahorro de costes innecesarios que puedan causar estragos en las finanzas.
Con el ERP de Ekon, tu compañía podrá gestionar todo lo referente al plan de mantenimiento preventivo, así como llevar un control exhaustivo de todas las máquinas, revisiones, modificaciones, reparaciones o cualquier otra acción que se ponga en práctica. Si necesitas cualquier tipo de asesoramiento, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.
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